Eligió
un día festivo, un viernes 12 de Octubre, para actuar ante un público que lo
esperó tranquilo y relajado, como es él, tomándose unas cervezas en el hall del Espacio Cultural Aguere en La Laguna. Nada hacía presagiar lo que luego
ocurriría en el interior de la Sala 2.
-Espero
hacerlo hoy mejor que el otro día con las entradas!, me dijo Fernando, el
técnico de sonido, al entrar en la sala.
-Seguro!,
contesté, - Este es tu trabajo.
Cuando
llegué a comprar mis entradas Fernando me confundió con una “cineadicta” que
llegaba tarde a la proyección de la película de turno y, entre copas,
peticiones varias, y que no se encontraba en su puesto habitual, me entretuvo
delante de la barra de la cafetería algo más de lo deseado. Pero por fin las
tenía en mis manos.
Cantautor canario. Habitual en locales, teatros
y festivales de canción de autor de todo el territorio nacional. Si pasa por tu
ciudad, invítalo a comer!!
Esta
es su carta de presentación en algunas redes sociales, pero ni estaba en mi
ciudad ni me atrevería a invitarlo a comer.
-A
saber qué le gusta, pensé. Y no está la cosa como para llevarlo a un
restaurante, mejor voy a ver su actuación y ya después si eso, pues…..
Se
presentó con su guitarra y, desde los primeros acordes y los primeros sonidos
de su voz, arrancaron los primeros aplausos. Insisto mucho en lo de “primeros”
porque fueron muchos los que se escucharon durante toda su actuación.
Luego,
La Bandota, con mayúsculas, que lo acompañó en gran parte del repertorio:
“Quédate”, “Te quiero”, “Sahara”, “Tu mano”, “Elena”, “Flaco”….
Sin
duda, grandes músicos, que con su buen hacer le dieron un aire especial al concierto. Pero nada tendría sentido sin su voz, la voz que le da
vida a unas letras que, desde la poesía, hablan de amor y desamor, de penas y
alegrías, de ilusiones y decepciones, pasando por los sueños que se quedan en
“mojado” de aquellos que buscan un mundo mejor, pero siempre transmitiendo
ideas y sentimientos.
-Felicidades
– le dije- Una gran actuación.
-Gracias
por venir – repondió - Me alegro de que hayas disfrutado.
-Quiero
uno de tus discos – dije con voz excitada mientras miraba fijamente sus
increíbles ojos azules.
-Te
lo regalo, ¿cuál quieres?
-Pues
no sé, ¿cuál está mejor?
-Buena
pregunta Carmen – contestó sonriendo – Porque tú eres Carmen, verdad?
Con Jesús Garriga Aprovechando el momento "rollito fan-cantautor" |
Pocas
son las personas que conocen mi primer nombre y seguro que habrá sido pura
casualidad, me habrá visto cara de muy española y teniendo en cuenta que celebrábamos el Día de la Hispanidad, habrá dicho:
- Vamos a probar con Carmen, a ver qué pasa!!
Aunque por la fecha también me habría podido llamar Pilar!!!
El caso es que, después de todo lo vivido ahí esa noche, nada se
puede comparar al placer que me produjo que el cantautor al que admiro me llamara por mi nombre y me regalara su disco.
-Suerte Jesús, que tengas muchos éxitos!
Muy buena esta entrada RiT. :) me gustó mucho.
ResponderEliminarBesotes
Un beso Laura.
EliminarCarmen Rita, Carmen...yo es que soy más mística. Besos
ResponderEliminarMística o no, tú eres de las que sabe perfectamente quien soy. Besos
EliminarAsí es el bueno de Garriga, algunos todavía no tuvimos la suerte de verlo con bandota pero sí de invitarlo a comer :-)
ResponderEliminarA ver si viene pronto a Madrid acompañado de esos músicos.
Saludos y gracias por acercarlo a los que estamos lejos.
Un placer Oski. Seguro que te gustará escucharlo con bandota aunque él solito es capaz de llegar a todos, ya lo sabes!
EliminarSaludos y nos vemos por esa utopía en días rojos, que me encantó!!
Me gusta mucho tu post, tus palabras, la forma de expresarlo y la cara de felicidad de la foto;-)
ResponderEliminarMuchos besos, comadre!!
Después de escucharlo cantar te aseguro que a cualquiera se le queda esa cara! Para mí es un placer que te haya gustado, ya sabes, soy buena alumna pero mi maestra es aún mejor. Besos.
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